Últimamente he tenido muchos momentos de reflexión sobre la muerte. Seis personas que conocía en algo más de un mes han fallecido.
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Últimamente he tenido muchos momentos de reflexión sobre la muerte. Seis personas que conocía en algo más de un mes han fallecido.
El tiempo no pasa despacico, pasa volando, van cayendo los días uno tras otro y de repente nos decimos “¡pero ya estamos casi en verano! ¡Se me ha pasado volando!” O al menos a mí me pasa.
Nos morimos. La gente se muere. Se muere mucho. Muy cerca. Bastante joven. Y en poco tiempo.
En cosa de menos de dos meses, han llegado a mis oídos cuatro historias de cuatro personas jóvenes que en una semana, les han detectado alguna enfermedad y han muerto. A uno de ellos en menos tiempo, un ictus.